¨El departamento de redacción
es sólo una sección más dentro del cuerpo de la empresa informativa¨.
David Atienza,
profesional administrativo del periódico financiero ¨El economista¨, habló el
pasado jueves día 26 de abril ante los alumnos de 1º de Periodismo. Gracias a
su enriquecida experiencia, supo transmitir a sus oyentes la forma en que se
articula una empresa de comunicación
aunque fuera desde la visión empresarial.
Como no podía ser de
otra manera, habló sobre uno de los temas más candentes de la actualidad
mediática: los retos de la empresa
informativa. Comenzó hablando de la predicción que algunos realizan sobre
que internet y las tabletas se comerán pronto al papel. Aseguró que a corto
plazo no lo veía tan viable, pues las tecnologías aún no estaban lo
suficientemente desarrolladas ni extendidas como para sustituir a un soporte
tan importante. Cuando este medio le preguntó si estaba de acuerdo en que el
futuro del papel estaría marcado por el avance en soportes como la tableta se mostró totalmente de
acuerdo. La tableta representa una gran esperanza para los medios que permitirá
aumentar la influencia de los mismos, pero actualmente es un aparato poco
extendido. Siguiendo con la línea de internet, aseveró que a pesar de que las redes sociales sirvan como fuente de
información debemos desconfiar de las mismas. Pueden servirnos como una pista o
inicio para la información pero siempre deben ser comprobadas. A pesar de que
el periodismo ciudadano esté en
auge, siempre se necesitará la labor de los
profesionales de la información.
Atienza, quiso hacer ver también a
los oyentes cómo funciona una empresa informativa. ¨Como periodistas creeréis
que sois la pieza fundamental de la
empresa, pero aprended a valorar el trabajo de los demás¨. Por esta línea, en
la que identificaba al periodista como el creador de la materia prima de la
empresa, continuó la charla. De esta manera buscó que nos diéramos cuenta de
que sin el trabajo de los departamentos
de publicidad o administración nuestra labor no podría ser difundida.
Tendríamos un mensaje pero sin posibilidad de emitirlo, por ello la labor de
cada miembro de la empresa es tan importante como la del anterior.
En definitiva se
pudieron extraer dos mensajes de su intervención, uno referido a los medios y
otro al funcionamiento de las empresas. El presente en la difusión de
contenidos aún se reparte, y seguirá repartiendo a corto plazo, entre el papel e internet. Finalmente, parece
que la importancia dada a la coordinación
entre áreas de una empresa informativa quizás haya rebajado el futuro ego de los periodistas aún non-natos.
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