Otros dos han sido condenados a cinco años de prisión en concepto de cómplices.
La Audiencia Provincial de Madrid
ha condenado esta mañana a tres porteros de discoteca a prisión tras el
asesinato del joven Álvaro Jesús de Ussía. La pena impuesta para el principal
responsable de los hechos es de quince años mientras que los otros dos,
acusados de complicidad en el homicidio, tan sólo a cinco.
Antonio Manuel Salas, alias
¨Pitoño, ha sido condenado esta mañana a quince años de prisión como principal
autor del homicidio contra Álvaro Ussía. Todo comenzó en la discoteca madrileña
Balcón de Rosales donde los tres imputados trabajaban como porteros. Álvaro,
tras un incidente con varias chicas, fue expulsado junto con sus amigos del
local.
Ya fuera, insultó a los procesados
quienes reaccionaron violentamente contra él. En concreto, ¨el Pitoño¨, fue
quien realizó un barrido al fallecido cayendo este de espaldas. Acto seguido,
el portero se lanzó sobre su pecho con las rodillas produciéndole una rotura
traumática del corazón que más tarde le causaría la muerte. Cuando Álvaro se encontraba en el suelo,
Antonio se dedicó a golpearle hasta dejarle inconsciente. Mientras tanto, los
otros dos acusados, permitieron esto mientras impedían que los amigos de la
víctima pudieran ayudarle. El SAMUR
llegó poco más tarde y, tras intentar reanimarle allí mismo, lo trasladó al
Hospital Clínico San Carlos de Madrid donde falleció a las 7 de la mañana.
Condena de prisión e inhabilitación
La juez ha impuesto al Pitoño la
máxima pena para un homicidio que considera ¨brutal y despiadado¨. Los cargos
se han visto agravados por la circunstancia de abuso de autoridad. Los quince
años además conllevan una incapacitación absoluta para todos los honores, empleos y
cargos públicos. En el caso de los otros dos porteros han sido penados con
cinco años de cárcel sin circunstancias agravantes. En su caso han sido
inhabilitados también durante cinco años más para el ejercicio de la profesión
de vigilantes de seguridad.
¨Se resbaló, me agarró y caímos juntos al suelo¨
El Pitoño asegura en unas
declaraciones que ¨Álvaro estaba muy nervioso. Forcejeamos, se agarró a mí y
caí encima suyo. En ningún momento le puse la rodilla en el pecho¨. Por su
parte, la Fiscalía contradice su historia haciendo valer los hechos probados
que aparecen en la sentencia.
La juez ya ha anunciado que se
podrá recurrir la sentencia, algo que por ahora no ha confirmado la abogada del
principal imputado. A pesar de ello, ya ha dicho que ¨aún faltan pruebas
concluyentes como el electrocardiograma del SAMUR¨.